Linea de tiempo
Deuteronomio
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1
Apertura; Jueces; Espías
El discurso histórico
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2
Pueblos contras los que no se debe luchar
El discurso histórico
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3
Guerra y asentamiento en la tierra de Sijón y de Og
El discurso historicó
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4
Fortalecimiento de la Fe y cumplimiento de preceptos
El discurso histórico
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5
El evento en el monte Sinai
El discurso de los preceptos-Amor y reverencia a Dios (Vaetjanán-Ekev)
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6
Shemá Israel; Prevención de la idolatría y el olvido de Dios;fortalecimiento del cumplimiento de los preceptos de la tierra
El discurso de los preceptos-Amor y reverencia a Dios
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9
Los pecados del pasado y sus lecciones
El discurso de los preceptos-Amor y reverencia a Dios
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11
Y será que si aceptar van a aceptar los mandamientos " - entre la tierra y los preceptos"
El discurso de los preceptos-Amor y reverencia a Dios
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12
Consumo de los sacros y carne del deseo
El discurso de los preceptos prácticos
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13
Incitadores e instigadores
El discurso de los preceptos prácticos
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14
Comidas prohibidas; Diezmos
El discurso de los preceptos prácticos
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15
Preceptos
El discurso de los preceptos prácticos
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16
Las tres festividades de peregrinación
El discurso de los preceptos prácticos
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17
Diversos preceptos; Liderazgo (Rey, Juez, Cohen, Profeta)
El discurso de los preceptos prácticos
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20
El comportamiento en la guerra; diversos preceptos
El discurso de los preceptos prácticos
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22
Compendio de leyes, fueros y preceptos (Dinero, Daños y perjuicios, Intimidad y entre el hombre y Dios)
El discurso de los preceptos prácticos
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26
Primicias,Separación de los Diezmos, síntesis
El discurso de los preceptos prácticos
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27
El evento en los montes Guerizim y Eibal
El discurso del pacto
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28
Las bendiciones y las maldiciones
El discurso del pacto
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29
Fortalecimiento de los conceptos del pacto
El discurso del pacto
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30
El retorno a Dios
El discurso del pacto
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31
La despedida; La escritura de la Torá
La despedida de Moshé y el cierre de la Torá
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32
Cántico de Haazinu
La despedida de Moshé y el cierre de la Torá
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33
Las bendiciones de Moshé
La despedida de Moshé y el cierre de la Torá
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34
Muerte de Moshé
La despedida de Moshé y el cierre de la Torá
Deuteronomio 17 Versículo 1
La Toráh continúa enunciando las desviaciones cultuales que hay que evitar, como el ofrecer animales defectuosos en los sacrificios rituales. A. este respecto comenta Malají: “Acercáis sobre Mi altar sacrificio mancillado. Y si dijéreis: ¿Con qué te hemos mancillado? Cuando decís: ¡La mesa que está ante Adonai está menos preciada! Y cuando ofrecéis sacrificio ciego para inmolar, ¡no hay mal!” (Malají 1:7 y 8, basado en Ibn Hezra).
El autor de Minjáh Beluláh, inspirado en interpretaciones del Midrash, considera que el último versículo del capítulo 16 y el primero del 17, aluden metafóricamente a aquellas personas incompetentes o de malas cualidades que hubieran sido designadas para ser los jueces del pueblo: “...Ya que el juez ignorante es considerado como piedra inerte, y así como el juez que no reúne las condiciones de competencia, virtud y bondad se compara, en la metáfora, al sacrificio defectuoso; ya que no hay peor defecto que un sabio de malas acciones y defectos perversos.
Deuteronomio 17 Versículo 2
Se ha señalado anteriormente que la función primordial de los jueces era desarraigar por todos los medios ilícitos el culto pagano del pueblo de Israel.
Tras enunciar la prohibición de los cultos paganos, nuestro pasaje se centrará en el tema del “individuo que se dedicare al culto del paganismo”. Esta ley ya ha sido enunciada en Exodo 22:19: “El que sacrificare para ídolos será muerto; excepto para Adonai, a El sólo".
“...HOMBRE O MUJER...”
A diferencia de la “ciudad desviada” en la que los hombres son los únicos pasibles de la pena máxima pues se presupone que ellos detentan el poder, decidiendo la “desviación”. Tratándose de una decisión libre y personal, en este caso para transgredir, la Toráh no establece diferencia entre hombre y mujer.
“...PARA TRANSGREDIR SU PACTO”
“Que había concertado D’s. con vosotros y que consiste en la no adoración de ídolos ni astros celestiales” (Rashi).
Deuteronomio 17 Versículo 5
Nuestra traducción se basa en la versión aramea de Onkelos. Según Jizzekuni, tal es el significado literal del término en su contexto. Sin embargo, Rashi sostiene que en realidad, se ajusticiaba al transgresor en el mismo lugar del culto pagano.
“… Y LOS LAPIDARAS...”
“Al hombre o a la mujer según el caso” (Ibn Hezra).
Deuteronomio 17 Versículo 6
La Toráh acepta a dos testigos como causantes de una acusación legal. El número adicional de testigos, al no ser requisito de la Toráh, no tiene mayor incidencia ni le da más fuerza al testimonio.
El Talmud, interpretando este versículo, deduce que dos, tres o cien testigos, tienen la misma fuerza; por lo tanto dos testigos pueden hacer el descargo del acusado que estuviere enfrentado al testimonio de cien personas en su contra.
Inversamente, si, investigación mediante, la corte invalida el testimonio de uno de los dos testigos, el testimonio no prosperaría. Lo mismo ocurrirá si de un grupo de más de das testigos se invalidara tan sólo el testimonio de uno de ellos.
Los testigos conforman un grupo que debe testimoniar simétricamente, sin importar su número. Dos testigos son suficientes, pero a partir de allí todos se consideran pertenecientes a un mismo grupo testimonial (basado en T.B. Maccot 5 B).
Deuteronomio 17 Versículo 7
Según el autor de Minjáh Beluláh, este procedimiento apunta a lograr que los testigos fueran muy escrupulosos en su testimonio. De pros perar la causa contra el acusado, basada principalmente en su testimonio, serían los testigos los encargados de ajusticiarlo; con ello se pretendía desalentar el falso testimonio.
Deuteronomio 17 Versículo 8
El pasaje incluido entre los versículos 8 y l3 es considerado por Abarbanel como “la base y esencia de toda la Toráh”. En él quedarán sentadas las bases de la función del “Bet-Din Hagadol” -la Gran Corte- llamada más tarde “Sanhedrín Guedoláh”, sita en una cámara contigua al Santuario de Ierushalaim.
La constitución de una Entidad Suprema de Justicia había sido aconsejada a Moshéh por su suegro, Itró. “Que juzguen ellos al pueblo en todo tiempo y que sea que todo asunto grande te lo traigan a ti y que todo asunto menor que lo juzguen ellos...” (Exodo 18:22).
Antes de ascender al Monte Sinai, Moshéh designó a los ancianos para juzgar al pueblo en su ausencia, nombrando a Aharón y a Hur como Ente Superior de Justicia. En Números 11:16 y ss. aparecen los setenta ancianos que formarán con Moshéh el primer “Bet-Din Hagadol” de la historia de Israel. El presidente del “Bet-Din Hagadol” llevaría el nombre de “shofet” -juez-, o “rosh” -jefe-, o “nasí” -presidente-.
Durante algunos períodos de la historia de Israel ocurrió que la mayoría de los miembros de la Corte “Sanhedrín” eran Cohaním y Leviím, dedicados al servicio de D’s. y “libres, sin labores ni preocupaciones por heredades y terrenos”. En Deuteronomio 33:10 se especifica la función de la tribu de Levi: “Habrán de enseñar Tus leyes a Iahacób, y Tu Toráh a Israel. Ellos pondrán incienso ante Ti y holocausto sobre Tu altar”.
Nuestro pasaje se dirige al juez de las cortes ordinarias que se encontrare frente a casos dudosos de difícil resolución. En este caso debería recurrir a la máxima autoridad jurídica del pueblo de Israel, al “Bet-Din Hagadol” (basado en Abarbanel).
“...ENTRE SANGRE Y SANGRE...”
Casos criminales.
”...ENTRE PLEITO Y PLEITO...”
Casos comerciales.
“...ENTRE HERIDA Y HERIDA...”
Casos de lesiones o fracturas.
“...CASOS DE CONTROVERSIAS...”
Esto incluye a todos los casos dudosos que puedan surgir además de los arriba mencionados.
Tal es la interpretación literal del versículo basada en Ibn Hezra, Rambán y Rabbenu Bejayé.
Otras interpretaciones talmúdicas incluyen entre estos casos dudosos, asuntos rituales relacionados con “tumáh” y “taharáh”, la pureza e impureza ritualmente definidas.
En tiempos de los reyes de Iehudáh, el Rey Iehoshafát había establecido una corte de justicia en Ierushalaim compuesta por Cohaním, Leviím y jefes de prosapias de Israel. En II Crónicas 19:9 y 10 leemos: “Les ordenó diciendo: Así habréis de hacer con reverencia a Adonai, con fe y con corazón pleno. Y cualquier pleito que fue re traído a vosotros, de vuestros hermanos, los que habitan en sus ciudades: entre sangre y sangre, entre Toráh y Mitsváh (precepto) y entre Jukim (fueros) y Mishpatim (leyes)...” Creemos ver en estas directivas la aplicación directa de las prescripciones anteriores.
Deuteronomio 17 Versículo 9
Para Jizzekuni, este requerimiento testimonia la existencia de una Toráh oral, interpretación y complemento de la escrita; “porque de no ser así, ¿para qué habría que recurrir a la corte de Ierushalaim, si todas las cortes de Israel tenían todos los textos de la Toráh escrita?”, constituyendo este versículo una respuesta contundente “a los herejes de Israel que desconocen las enseñanzas de los sabios del Talmud”.
“...O AL JUEZ QUE HUBIERE EN AQUELLOS DIAS...”
“Aunque no sea como los otros jueces que lo han precedido en el cargo, tú le debes obediencia. No tienes otro juez más que el que está en tus días, o sea, tu contemporáneo” (Rashi).
Rashi expresa la interpretación talmúdica de este versículo. “El juez Iftáj en su época se equipara al profeta Shemuel en la suya; para enseñarte que, fuere quien fuere designado “con ductor de la comunidad”, se equipara a cualquier otro que haya ostentado el mayor de los abolengos...” (T.B. Rosh Hashanáh 25 B). “No digas ¿qué ha ocurrido que los días pretéritos han sido mejores que los actuales?” (Kohelet 7:10).
Estas normas rigen siempre y cuando nuestros conductores -sean los que fueren- vivan de acuerdo a las enseñanzas de la Toráh escrita y oral, ya que de allí emana su autoridad, para la función, en el lugar elegido por D’s.
Deuteronomio 17 Versículo 10
Según Ibn Hezra, referencia al caso específico aclarado por el “Bet-Din Hagadol” de Ierushalaim, hipotéticamente presentado por un juez de una corte ordinaria de justicia.
No obstante, los sabios del Talmud amplían el alcance de estas palabras diciendo que los miembros del “Bet-Din Hagadol”,y más tarde los del “Sanhedrín”, tienen la facultad de establecer “enmiendas y decretos” para preservar y hacer efectivo el cumplimiento de las mitsvot, debiendo el juez subalterno y el resto del pueblo aceptarlas de buen grado.
Maimónides basado en el versículo 11: “De acuerdo con la Toráh que te hayan de enseñar y según el juicio que ellos te digan, habrás de hacer...” dictamina que las mitsvot obligatorias como la lectura de la Meguiláh, el encendido de ve las en víspera de Shabbat y el encendido de las luminarias de Janukáh, así como otras optativas, deben ser precedidas por una “berajáh” en la que bendecimos a D’s. por habernos consagra do con Sus preceptos y habernos ordenado cumplir estas mitsvot. Y se pregunta el maestro: ¿dónde nos ha ordenado D’s. cumplir estas mitsvot? -en la Toráh donde está escrito: “lo que ellos te digan habrás de hacer”.
D’s. nos ha consagrado con Sus preceptos, entre ellos el de acatar a quienes nos prescribieron encender las luminarias de Janukáh, leer Meguilat Esther y las demás prescripciones “midibré soferim” -establecidas por los maestros de la Toráh oral- (Mishnéh Toráh Hiljot Berajot Cap.11 Halajáh 3).
Deuteronomio 17 Versículo 11
En opinión de Rashi, los jueces deben obediencia total al “Bet- Din Hagadol”. El Midrash Sifrí interpreta que el juez debe acatar las enseñanzas de esta Corte Suprema aún si “piensa que está tergiversando la ley”
Rambán en un amplio comentario explica la esencia de esta ley. Cita a modo de ejemplo, la divergencia suscitada entre Rabbán Gamliel, jefe del Sanhedrín de Iavneh, y el eminente sabio da Israel Rabbí Iehoshúah respecto a la fijación del novilunio. En ese entonces, las bases del calendario hebraico actual, producto de complejos estudios astronómicos, se constataban y aplicaban pragmáticamente.
A pesar del razonamiento lógico sustentado por Rabbí Iehoshúah, Rabbán Gamliel -a la cabeza del Bet-Din Hagadol- decretó que tenía que presentarse “en el día de Iom Quippur -del calendario propuesto por Rabbi Iehoshúah con su bastón y con sus dineros". De presentarse en es tos términos, Rabbi Iehoshuah habría aceptado la autoridad de Rabbán Gamliel, en contra de sus propias convicciones y cálculos rigurosa mente lógicos.
En definitiva Rabbi Iehoshúah aceptó el decreto de Rabbán Gamliel y se presentó ante él en las condiciones exigidas. “Se levantó Rabbán Gamliel ante su presencia y le besó la cabeza, diciéndole: ‘Ven en paz, maestro mío y discípulo mío; maestro mío en sabiduría, y discípulo mío, porque aceptaste mi palabra’. (T. B. Rosh Hashanáh 25 A).”
Rambán agrega que la mitsváh de obediencia a la Corte Suprema es imperiosamente necesaria, puesto que la Toráh nos ha sido dada por escrito y no todas las opiniones coinciden en su interpretación. Por lo tanto “pueden acrecentarse las divergencias, convirtiéndose la Toráh en “varias Torot”. Por ello la Escritura nos ordena categóricamente obedecer al Bet-Din Hagadol que sesiona ante D’s. en el lugar que El habrá de elegir, en todo lo relativo a la interpretación de la Toráh. Sea que hayan recibido esta interpretación por tradición oral, persona a persona, remontándose hasta Moshéh que la recibió por Revelación Divina, o bien que nos enseñen de acuerdo al significado o a la intención de la Toráh, ya que D’s. la entregó acorde a su cono cimiento (de los maestros dala Corte Suprema); aunque te parezca que estén invirtiendo la derecha por la izquierda. Y con mucha mayor razón deberás acatar sus decisiones cuando te digan que la derecha es derecha y la izquierda es izquierda...
Deuteronomio 17 Versículo 12
“Alusión al sabio de Israel que estuviere eventualmente en disidencia con el Bet-Din Ha gadol, dictando sentencias en desacuerdo con la opinión de la Corte Suprema, en relación a ca sos que, de ser considerados alevosos serían posibles de la pena de “caret” -alma truncada- y en caso contrario podrían ser absueltos mediante un sacrificio “Este hombre sería considerado “zakén mamréh” -sabio que se rebela- y pasible de pena de muerte” (Rabbenu Bejayé Ben Asher).
“..QUE ACTUARE CON ALEVOSÍA..”
El juez rebelde no entra en la categoría de - “zakén mamréh” –sabio rebelde-, que lo puede llevar a la pena de muerte, mientras no se hubiere ejecutado la sentencia o dado instrucciones para ejecutarla. Tampoco si, disintiendo con la Corte Suprema, “llegara a investigaciones o disensos teóricos”, en cuyo caso se tomarían contra él las sanciones disciplinarias del caso (basado en T.B. Sanhedrin 86 B).
“...HABRA DE SER MUERTO EL HOMBRE AQUEL..”
Este ‘juez en rebeldía” será ajusticiado, no por las cortes ordinarias de justicia, sino por el “Bet-Din Hagadol” de Ierushalaim. Se debía darla mayor difusión al tema (basado en T.B. Sanhedrin 89 A).
Deuteronomio 17 Versículo 14
La designación del rey no es una opción, sino un precepto imperativo a regir después de la eventual conquista de la Tierra de Promisión y el asentamiento en quietud en ella.
Asilo ha codificado Maimónides en Mishnéh Toráh Hiljot Melajim, Cap.1 Halajáh 1, quien agrega que después de su designación el rey deberá proceder al enfrentamiento con Hamalek - pueblo que nos atacara arteramente cuando salimos de Egipto- y recién entonces comenzar la construcción del Bet Hamikdash, Santuario central del pueblo de Israel, erigido en Ierushalaim, ciudad elegida por D’s. para Su pueblo.
En contradicción absoluta con los codificadores de la Halajáh y los comentaristas de la Toráh, Abarbanel (así como Ibn Hezra) opina que esta mitsváh es optativa o eventual. Cita en su apoyo el versículo 15 de nuestro capítulo: “De signar, habrás de designar sobre ti un rey -el que haya de elegir Adonai tu D’s.-”. Por lo tanto, el rey no será elegido libremente por el pueblo, si no designado por De. a través de Su profeta.
De acuerdo a esta posición de Abarbanel, queda resuelta la dificultad suscitada en 1 Samuel 8:4 y ss., donde leemos que, cuando lo. hijo de Israel le pidieron al profeta que les designo un rey, Shemuel quedó muy contrariado y disgustado. De ser ésta una “mitsvát haséh - precepto por comisión- el profeta jamás se hubiera opuesto a su cumplimiento.
Los comentaristas partidarios de considerar la designación del rey como “mitsvát haséh” sugieren que la intención del pueblo en su pedido a Shemuel no habría sido el cumplimiento de la Toráh sino la voluntad de asimilarse alas naciones circundantes queriendo ser gobernados por un rey “no de acuerdo a las leyes de la Toráh, si no más bien “quejol hagoím”, de acuerdo a leyes paganas de la época”.
Deuteronomio 17 Versículo 15
La Mishnáh Sotá VII 8, relata que el rey Agrippa, descendiente de Herodes, el Edomita, leyendo en cierta ocasión la Toráh en presencia de los sabios, al llegar a este versículo le brotaron lágrimas de los ojos. Los sabios de Israel presentes lo tranquilizaron diciendo: “…Agrippa, tú eres nuestro hermano, tú eres nuestro hermano”. Se lo había considerado hermano por ser su madre judía. Más tarde los Emoraítas -sabios intérpretes del Talmud- criticaron esta actitud de los sabios contemporáneos del rey, ya que, según el Talmud tanto la madre como el padre del rey deben ser judíos (T.B. Sotá 41 B).
De acuerdo al Midrash Sifrí, quien ocupe el trono de Israel tiene que ser residente permanente de la Tierra de Israel, inhibiendo para el cargo a cualquier judío de la diáspora (citado por Toráh Temimáh).
Deuteronomio 17 Versículo 16
Solamente podrá poseer los caballos necesarios para su carroza y sus jinetes. Estos anima les, ala sazón considerados elementos bélicos de primera línea, procedían principalmente de Egipto (véase 1 Reyes 10:29). En tres oportunidades la Toráh nos previene no retornar a Egipto: Exodo 14:13, Deuteronomio 28:68 y Deuteronomio 17:16 (basado en el Talmud Ierushalmi Tratado Succáh Cap.5 Halajáh 5).
Algunos sabios de Israel opinan que la prohibición de residir en Egipto se refería sólo a aquellos judíos “que abandonaban la Tierra de Israel para ir a establecerse en Egipto” (citado por Rabbí Elihezer de Metz en el libro Sefer Mitsvot Gadol, número 2:27).
Deuteronomio 17 Versículo 17
Leemos en 1 Reyes 11:4: “Y ocurrió que en el tiempo de la vejez del rey Shelomóh, sus mujeres le hicieron desviar su corazón.., y su corazón no permaneció íntegro con Adonai su D’s., como lo fuera el corazón de David su padre”.
“...Y NI PLATA NI ORO DE BERA INCREMENTAR...”
“Para no castigar al pueblo con impuestos excesivos” (Ibn Hezra).
Efectivamente, después de la muerte del rey Shelomóh una rebelión contra sus pesadas cargas impositivas culminó en una escisión del reino (véase 1 Reyes 12:18,19).
Deuteronomio 17 Versículo 18
Según el Talmud (T.B. Sanhedrín 21B) el rey escribía en su nombre dos rollos de la Toráh. Uno “salía y entraba permanentemente con él” y otro estaba depositado en la cámara de sus tesoros. A pesar de que su antecesor, su padre, había sido rey y él también había escrito una Toráh a su nombre, el nuevo rey no debía vanagloriarse de la Toráh de sus padres, y tenía que escribir la suya propia” (Ibidem Ibidem).
“...LA REPETICION DE LA TORA"
Según el Talmud (T.B. Sanhedrin 22:A), las palabras “Mishnéh Toráh” insinúan la posibilidad de “cambio”“leshannot”, ya que en la época de Hezrá el escriba, dirigente espiritual de Israel surgido en Babilonia que condujo la reconstrucción material y espiritual del pueblo, se produjo el cambio de la escritura de la Toráh. Para su texto se empleó la escritura cuneiforme o “ashurit”, que perdura hasta hoy, manteniendo el idioma hebreo original, tal como surgió por Mandato Divino transmitido palabra por palabra desde Moshéh Rabbenu, ininterrumpidamente hasta Hezrá el escriba.
Según el autor de Toráh Temimáh, el propósito de Hezrá habría sido alejar a los Cutim (Samaritanos) que intentaban falsificar el texto de la Toráh. Tras el cambio introducido por Hezrá, la Toráh de los Samaritanos, con escritura he brea, ya perimida, e idioma arameo, hoy en de suso, quedó diferenciada de nuestro texto de la Toráh.
El cambio de Hezrá afectó solamente a la escritura, no modificando un ápice de nuestra Sagrada Toráh tal como nos fuera revelada en el Monte Sinai
Deuteronomio 17 Versículo 19
La Toráh.
Deuteronomio 17 Versículo 20
“Si estuviere libre del cumplimiento de las mitsvot” (Ibn Hezra).
Sólo la observancia de la Toráh, que abarca todas las áreas de la vida, podrá disciplinar también al rey de Israel.
“...PARA QUE PROLONGUE DIAS...”
“Como la responsabilidad y el agobio de los cargos públicos acortan la vida del gobernante, éste necesita una fuente de vida. Por esta razón se dice “Viva el rey!” cuando se pone en funciones al nuevo monarca” (véase 1 Reyes 1:25; basado en Jizzekuni).