¿Por qué la Torá eligió incluir la cuestión de la impureza de los Cohanim (Sacerdotes), destinada sólo a los sacerdotes, justamente en la segunda parte del libro Vaikrá y no en la primera parte dedicada exclusivamente a los Cohanim?
¿Por qué la Torá eligió incluir la cuestión de la impureza de los Cohanim (Sacerdotes), destinada sólo a los sacerdotes, justamente en la segunda parte del libro Vaikrá y no en la primera parte dedicada exclusivamente a los Cohanim?
La Guemará en el Tratado de Zevajim 17, carilla 2 plantea la hipótesis de que la definición de una determinada persona como Cohen depende en gran medida de la tarea que él efectivamente realiza en el Beit Hamikdash (Gran Templo). Puede decirse, que en los episodios anteriores del libro Vaikrá se ocuparon extensamente de la cuestión del Cohen y sus cargos-funciones en el Beit Hamikdash, no obstante nuestro episodio comienza a abordar la santidad del Sacerdocio en su más amplio sentido, y acerca de su aplicación fuera del mundo relativo al Templo. En otras palabras, nuestro episodio nos informa que el Cohen sigue ostentando dicho cargo aún fuera del Beit Hamikdash, y del mismo aprendemos que las leyes de impureza de los Cohanim no están destinadas únicamente al Cohen que presta servicio en el Templo, donde ocasionalmente se encontrará con esas leyes.
Parece que lo que es cierto en relación al Cohen que presta servicio en el Templo, lo es también para el Cohen espiritual que se halla en cada uno de nosotros. Al igual que el Cohen, también el estudioso de la Torá tiene una doble identidad: por un lado nos definimos a partir de nuestra presencia en el Beit Hamidrash (Casa de Estudios), no obstante, por otro lado, incluso cuando no estamos en ese recinto estamos obligados a aspirar a la conformación de un espacio acorde a la Torá e identificarnos con él. El Beit Hamidrash es nuestro Beit Hamikdash y nos comportamos en él tal como actúa el Cohen en el Templo, sin embargo, cuando abandonamos el Beit Hamidrash continuamos preservando nuestra identidad como individuos que vivimos en el espíritu acorde a la Torá. Así como el Cohen que se encuentra en Tel Aviv, también nosotros continuamos siendo individuos en el espíritu de la Torá fuera del Beit Hamidrash, con toda la responsabilidad que ello implica.
Editado por el equipo del sitio del Tanaj
Gentileza del sitio VBM de la Academia Rabínica "Har Etzion".