Y se consumirá todo el ejército celestial

Y se consumirá todo el ejército celestial

La destrucción de los pueblos profetizada por Yeshaiahu se potencia a partir de la descripción del ocaso de las estrellas en el cielo-metafórica y esencial.

Nuestro capítulo es una profecía de una matanza entre los pueblos, y particularmente Edom. Junto con la descripción de la gran cantidad de bajas entre los pueblos, Yeshaiahu describe la destrucción celestial de las estrellas: "Y se consumirá todo el ejército del cielo: y los cielos se arrollarán como un rollo; y toda su hueste se marchitará, como se marchita la hoja de la vid, o como la fruta ajada de la higuera “(versículo 4). ¿Qué significa esta frase y cómo se integra con el resto de la profecía?

Citaremos dos explicaciones de los comentaristas en diferentes planos-

El comentarista Radak (Rabí David Kimhi) sostiene que este versículo nos ilustra metafóricamente cuán terrible es la problemática en la que se encuentran los pueblos, hasta el punto de que sentirán como si su mundo se hubiera oscurecido. “Esto se expresa de manera figurada, ya que para alguien a quien le sobreviene una gran aflicción, es como si los cielos y la tierra se hubieran vuelto contra él y el mundo se hubiera invertido, de modo que el ejército de los cielos ya no brilla para él y el mundo se ha oscurecido a sus ojos”. El problema es tan grande que incluso las estrellas no iluminan a los pueblos, se marchitan y desaparecen, al igual que las hojas que se caen de la vid y la higuera. El cielo, que está "extendido como una tienda de campaña", y en el que están insertadas las estrellas, “parecerá enrollarse como un libro”.

A diferencia de ello, el comentarista Malbim (Rabino Meir Leibush ben Iechiel Michel) comprende la profundidad de la profecía como la destrucción fundamental de las naciones. Él expresa que "se consumirá", describe que "cada nación y pueblo tiene una raíz en los cielos, de la cual extrae su fuerza y existencia", y estos son los llamados "príncipes" de esos pueblos y si una nación cae pero su raíz permanece en los cielos, es como un árbol que ha sido cortado, pero su raíz sigue intacta, por lo que puede volver a brotar.

Según el Malbim, todo pueblo tiene una raíz celestial, y si ésta no es destruida, no es posible destruir al pueblo. Por consiguiente, cuando se dice que el ejército de los cielos se consumirá, la intención es que también las raíces de las naciones en el cielo se consumirán, y por ende los pueblos, no podrán volver a crecer, y su destrucción será total.

Los referentes que escriben en esta sección son miembros de la organización NAJAT-jóvenes amantes del Tanaj, un Centro de Estudios del Tanaj para la juventud.

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