En nuestro capítulo, Ester trama la caída de Hamán, cuando como parte del plan ella lo invita a un banquete junto con el rey. ¿Qué es lo que esto significa?
En nuestro capítulo, Ester invita a Hamán junto al rey Ajashverosh. ¿Cuál era su intención? ¿Por qué decidió darle la sensación de gran honor con la que saldrá del banquete? El rey Shlomó nos enseña un principio importante: (Mishlei, Proverbios, Capítulo 25, versículo 21): “Si tu enemigo tuviere hambre, dale pan que comer; y si tuviere sed, dale agua que beber” El Maharal explica, que el elemento que define a la persona es la característica de la carencia. Sólo cuando el hombre toma conciencia de su falta, asoma entonces D-s, que lo puede complementar en esos ámbitos. Una idea similar se halla en la base de la plegaria-la sensación de la falta y la necesidad de la ayuda divina es necesaria para que la plegaria sea respondida.
Por esta razón, el castigo de la serpiente fue que la comida que requiera será polvo, es decir, algo que se halla en todo lugar (Bereshit, Capítulo 3, versículo 14). Su castigo fue que siempre estará llena y no sentirá necesidad alguna, y por consiguiente, no tendrá hacia dónde avanzar. La falta de posibilidad de avanzar ¡es el castigo más grande que se puede dar!
En base a esta idea, puede explicarse por qué Ester invitó a Hamán al banquete.
Ella quería transmitirle la sensación de honor y de saciedad, para que se sintiera lleno, y sólo en ese estado, cuando él no sienta la falta de honor o riqueza, se lo puede vencer. Mientras él conservaba su deseo de avanzar, era muy difícil vencerlo. Sólo cuando Hamán consideró que ya no tiene hacia dónde avanzar y que llegó a la cima de sus aspiraciones, Ester puede provocar su caída.
Y a ello justamente, se refiere el versículo del libro Mishlei, Proverbios: si quieres vencer a tus enemigos, debes satisfacer todas sus necesidades. Sólo en ese estado, cuando estén satisfechos, podrás vencerlos.
Editado por el equipo del sitio del Tanaj
Gentileza del sitio VBM de la Academia Rabínica Har Etzion