Iosef calma a sus hermanos y les comparte el hecho de que su venta es parte de un amplio plan de Dios. ¿Acaso esto exime a los hermanos de su responsabilidad?
El episodio de las intrigas de Iosef nos detalla dos movimientos paralelos: el movimiento humano y el movimiento Divino. Cuando Iosef se da a conocer asus hermanos, él se apresura a calmarlos:
“Mas ahora, no se entristezcan ni se encienda vuestro furor contra ustedes mismos porque me han vendido a este lugar; ya que para sustento me ha enviado Elohim ante ustedes…Mas me ha enviado Elohim ante ustedes para preservar a vosotros remanente en la tierra y para sustentarlos; para una gran salvación”(Versículos 5-7).
Iosef se ubica en la brecha entre el movimiento humano y el movimiento celestial. Los hermanos de Iosef no se imaginaron que su venta finalmente lo llevaría al sillón del gobernador en Egipto. ¿Quién podía imaginar un escenario tan extraño como este? Pero este era el plan de Dios. Así, Iosef calma a sus hermanos: no estoy enojado con ustedes, porque todos hemos sido utilizados aquí como instrumentos en el gran juego del creador del mundo.
Pero debe recordarse que estos conceptos no son una declaración explícita del texto bíblico, sino las palabras de Iosef, que trata de calmar a sus hermanos aterrorizados. Jaza”l (nuestros Sabios de Bendita Memoria) definieron que a pesar de lo mencionado en el acuerdo de las partes en relación al exilio de Israel, si Iaacov y sus hijos se hubieran comportado de otro modo, no hubieran descendido a Egipto”: por el peso de dos rocas una palabra que Iaacov le dijo a Iosef más que al resto de sus hijos, provocó los celos de sus hermanos, esto se desencadenó y nuestros antepasados descendieron a Egipto” (Tratado de Shabat 10, carilla 2).
Incluso si Dios manejó los sucesos para que Iosef descendiera a Egipto, aún así ello no exime a sus hermanos de la responsabilidad, ya que sus actos condujeron indirectamente a la venta. Este es el concepto opuesto de lo que se infiere de las palabras de Iosef: hay aquí una potenciación de la responsabilidad personal y no una reducción.
Editado por el equipo del sitio del Tanaj del libro "Perashot" publicado por "Maaliot"