El proceso de “Teshuvá” (Retorno al camino de Dios, alejándose de las malas conductas), generalmente, es realizado por un integrante del pueblo de Israel, en un movimiento que va de abajo hacia arriba, y el proceso de la redención es ejecutado principalmente por Dios, como un movimiento de arriba hacia abajo. La apertura del corazón vincula a ambos procesos.

Los versículos 1-10 tratan sobre el tema de la “Teshuvá”, el “Retorno” y la temática de la redención, y combinan entre los dos.

En la parte central de la sección figura el versículo 6:

“Y abrirá (la Torá utiliza la figura de “circuncidar” el corazón) Adonai, tu Dios, el atasco de tu corazón, y del corazón de tu descendencia, para amar a Adonai, tu Dios, con todo tu corazón y todo tu ser, para la causa de tu vida” (Versículo 6)

Este versículo refleja un desarrollo significativo sobre el tema de la “Teshuvá”, ya que efectivamente, describe un fenómeno singular. Por un lado, pertenece a la cuestión de la Teshuvá; y por otro, describe la acción de Dios en favor de Israel, y no una acción de un miembro del pueblo de Israel. Dicho acto genera algunos interrogantes: ¿Cuál es el sentido de la apertura del corazón? ¿Por qué es necesaria la apertura del corazón después de que el pueblo ya realizara un excelente proceso de “Teshuvá”, como se menciona en el versículo 2? ¿Cuál es el lugar de la apertura del corazón en el proceso del Retorno y de la Redención?

La circuncisión (en el cuerpo) representa una señal y un nexo entre el pueblo de Israel y Dios. La circuncisión consiste en la extracción del prepucio, que representa una cobertura, y al ser quitada dicha cobertura, queda expuesto el verdadero ser interior, relacionado con la santidad. Es decir, la santidad se halla en la persona judía desde su nacimiento, pero debe ser descubierta; la extracción del prepucio exhibe la santidad que se halla en nuestro interior.

La apertura del corazón de todo el pueblo de Israel, puede ser interpretada de un modo similar. Al hallarse el pueblo de Israel entre otros pueblos, su particular santidad está cubierta por “un prepucio”. El proceso de la redención incluye la salida del pueblo de Israel de en medio de otros pueblos, y parte de este proceso es el de quitar el prepucio del corazón, o sea, quitar la cobertura que impide el acercamiento del pueblo de Israel a Dios, y a partir de ello la revelación de la santidad interior natural del pueblo de Israel. El proceso de “Teshuvá” (Retorno), generalmente, es realizado por un integrante del pueblo de Israel, en un movimiento que va de abajo hacia arriba, y el proceso de la redención es ejecutado principalmente por Dios, como un movimiento de arriba hacia abajo. La apertura del corazón vincula a ambos procesos; es, por cierto, parte del proceso de la “Teshuvá”, pero también es parte del proceso de la redención. En el proceso de la redención, Dios quita todos los escollos que le impiden a Israel el acercamiento a Dios: concluye la sumisión a otros pueblos, el pueblo de Israel retorna a la Tierra Santa, y se terminan los tormentos y las dificultades físicas. La apertura del corazón es parte de este proceso, en el que son quitadas todas las coberturas  y las vallas que impiden el acercamiento entre Israel y Dios.

Editado por el equipo del sitio del Tanaj

Gentileza del sitio VBM de la Academia Rabínica "Har Etzion".