La Casa de Basha y la Casa de Omrí

La Casa de Basha y la Casa de Omrí

División del capítulo:

Capítulo 15 versículo 33-capítulo 16 versículo 7: El reino de Basha en Israel
Versículos 8-14: El reino de Elá hijo de Basha
Versículos 15-20: El reino de Zimri
Versículos 21-28: El reino de Omrí y la construcción de Shomrón
Versículos 29-34: El reinado de Ajab y sus pecados
 
1. Versículos 1-7: El reino de Basha en Israel

a. Yehu profetiza sobre Basha con las palabra utilizadas por Ajiá al profetizar sobre Yarovam (Capítulo 14, versículos 7-11), pero en ese caso, se trata de un rey designado por un profeta y ¡aquí no! Y en efecto, no encontramos otros reyes a los que les fuera mencionado “ Por cuanto Yo te elevé desde el polvo“…¿Entonces, por qué justamente Basha se “hace acreedor” a este texto? Puede que esté relacionado con el hecho de que a pesar de no haber sido designado como rey por un profeta pero aún sin saberlo, era un enviado de Dios para destruir la dinastía de Yarovam. Por ende, en el momento en que se encamina en la senda de Yarovam, transforma su misión en algo carente de valor. Otra opción es que efectivamente fue nombrado por un profeta, a pesar de que no haya sido explicitado.

b. Al final del versículo 7 se menciona que Basha fue castigado por hacerle daño a la dinastía de Yarovam. ¿Acaso no era lo que se esperaba que él realizara? Este fenómeno lo encontraremos también en relación al rey Yehu. Yehu fue ungido por el asistente de Elishá y destruyó a la dinastía de Ajab a partir de una clara conciencia profética (Melajim II, capítulo 9, versículo 7), y a pesar de ello, Hoshea (capítulo 1, versículo 4) ¡habla sobre el duro castigo de la dinastía de Yehu a raíz de este hecho! La respuesta, en ambos casos, es que si la eliminación de una dinastía real fue realizada a partir de móviles positivos, he aquí que es eso precisamente lo esperable. No obstante, en el momento en el que el rey que eliminó a la Casa real anterior, continúa en esa misma senda, pues la eliminación se convierte en innecesaria y es considerada como asesinato.

2.   Versículos 8-14: El reino de Elá, hijo de Basha

¿Qué podemos saber acerca de las causas del atentado contra Elá? En los versículos 9-10 se describe el acto del atentado cuando el rey se encuentra en estado de ebriedad en Tirtza. Debe tomarse en cuenta que en el versículo 15, el cual describe el breve gobierno de Zimri, el pueblo acampa en Guibtón y allí escuchan acerca de los cambios en el gobierno.  Se trata del mismo Guibtón en el que acampó Nadav, el hijo de Yarovam, cuando Basha tramó algo contra él como vimos en el capítulo 15. Es decir, que hay aquí una guerra continua que no ha finalizado, y en el marco de la misma, ¿qué hace el rey? ¡Bebe hasta emborracharse en Tirtza! Esta falta de nexo entre el rey y los combatientes explica el motivo que encontraron para atacar al rey.

3. Versículos 21-28: El reino de Omrí y la construcción de Shomrón

El traslado del centro del reinado a una nueva region, refleja una nueva época y en efecto, el reinado de Omrí se mantuvo durante 50 años y esto en comparación con la inestabilidad reinante en el reino de Israel hasta entonces. Así también, la construcción de la ciudad de Shomrón y la región, dejaron una fuerte impronta por muchas generaciones, debido a su importancia. Jazal, nuestros Sabios de Bendita Memoria, elogiaron las acciones de Omrí en este contexto (Sanhedrín 102b). Las ruinas de la ciudad se encuentran en el ámbito de la aldea Sebastia al norte de Shjem (Nablus), lindante con el poblado de Shavei Shomrón. También, la construcción de Ierijó, en la época de su hijo, Ajab, está directamente relacionada con el fortalecimiento del reino.

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