El relato de la destrucción de Shomrón concluye un largo proceso que condujo a esta decadencia, que precisamente surgió de los errores del pueblo, y no de los pecados de los mismos reyes.
Desde una mirada general al libro Melajim, parece que las épocas son contempladas acorde a las acciones de los reyes, principalmente, en el reino de Israel. También los reyes de Iehudá fueron colocados frente a los reyes de Israel, y cuando sus reyes se desviaron del camino, esto fue descrito mediante una comparación con sus pares israelíes.
En nuestro capítulo, que describe la destrucción del reino de Israel y el exilio de las diez tribus, se cita el detalle de causas que provocaron la destrucción del reino. Al observar estas razones, se concluye que allí no son mencionados en absoluto los reyes de Israel-o sea, los reyes que el libro describe como malos a los ojos de Dios y paganos, no son en definitiva, los motivos de la destrucción. A la luz de ello, los reyes son descritos desde otra perspectiva- como reflejo de la situación del pueblo. Sus pecados principales no fueron la principal causa de la destrucción, sino las personas de Israel que vieron las acciones de los reyes y continuaron en su senda “Y los hijos de Israel anduvieron en todos los pecados de Yarovam, que éste cometió: no se apartaron de ellos” (versículo 22). La destrucción del reino de Israel no fue provocada por una sucesión de hombres malvados que se apoderaron del reino, sino a partir de la elección del pueblo de seguir en la senda de sus reyes, en lugar de oponerse a ellos.
Los referentes que escriben en esta sección son miembros de la organización Najat, jóvenes amantes del Tanaj, un Centro de Estudios del Tanaj para la juventud.