En el libro de Ezrá hay dos inmigraciones: la inmigración de Zerubabel y la de Ezrá. A diferencia de Zerubabel que llegó con el objetivo de restituir la gloria: renovar el reinado de David y construir el Beit Hamikdash, Ezrá, por su parte, llegó con expectativas más modestas: rehabilitar a Iehudá como una comunidad religiosa bajo dominio persa. ¿Cuál es la razón de ello? ¿Dónde desaparecieron las profecías de consuelo?
En el libro de Ezrá se describen dos Aliot, inmigraciones: la Aliá, inmigracion de Zerubabel (en los capítulos 1-20) y la de Ezrá (capítulos 7-8), pero hay grandes diferencias entre ellas.
Desde el aspecto numérico: la inmigración de Zerubabel es gigantesca e incluye alrededor de 250.000 personas (42.360 hombres más mujeres y niños), frente a la Aliá de Ezrá que incluye 12.500 personas.
Desde l aspecto del cargo: Zerubabel, descendiente de la casa de David, llega como gobernador en representación del reino persa, junto a Yehoshua, el Cohen Gadol, el Sumo Sacerdote, con el objetivo de restituir la gloria del reinado de Iehudá y el Beit Hamikdash, el Gran Templo.
A diferencia de ello, Ezrá llega a Israel como “Gran Rabino”-recibe la autorización persa para enseñar las leyes de la Torá y designar a los jueces. Su objetivo es recomponer a Iehudá como una comunidad religiosa autónoma bajo el gobierno persa.
Dichas diferencias se ponen de manifiesto a lo largo de todo el libro:
Zerubabel congrega al pueblo el día 1 de Tishrei, a fin de construir un altar y reanudar el servicio en el Templo, mientras que Ezrá reúne al pueblo el 1 de Tishrei para leer la Torá.
En la época de Zerubabel lloran por el hecho de que el Beit Hamikdash no es tan bello como el primero, mientras que en el periodo de Ezrá y Nejemiá, lloran por no cumplir la Torá.
En los dias de Zerubabel se relata acerca de las ofrendas diarias que se elevaban en la festividad de Sucot, mientras que en la aepoca de Ezrá se hace referencia a la lectura diaria de la Torá en la festividad de Sucot.
Ezrá y Nejemiá desean rehabilitar a Iehudá desde el aspecto religioso: alejan a las mujeres no judías y acuerdan un convenio sobre el cumplimiento de la Torá. No intentan traer la redención, ya que entienden que ello no es posible.
La pregunta que surge es: ¿Cómo esto sucedió? ¿Dónde desaparecieron las profecías de consuelo?
Los acechadores, enemigo, frenan la construcción del Templo. La primera Aliá, no fue suficiente para detener el ataque político de los enemigos de Iehudá y Biniamín, y tambien, tras la reanudación de la construcción no cesan en su intención e irrumpen en las murallas de Ierushalaim. Incitan al gobierno persa contra Iehudá. Después de Zerubabel, no vuelve a ser nombrado un administrador de la Casa de David. Iehudá se achica, la Casa de David desaparece, y con ella, desaparece la profecía.
A partir de ello, debemos aprender, que el despertar nacional y una gran inmigración, no son suficientes. A fin de preservar y mantener viva la aspiración de la redención completa debe realizarse un esfuerzo mayor. Ante todo, se debe traer una nueva Aliá.
Síntesis del equipo del sitio de Tanaj.
Extraído de una clase dictada en el marco de una Jornada de Estudio realizada en el año 5768.