El capítulo está en arameo. Las citas aquí mencionadas, fueron extraídas de la traducción del Rabino Dan Beeri.
El hallazgo del rollo de Koresh (versículos 1-5)
Dariavesh (Darío) solicita a sus súbditos que busquen en la “Casa de los Libros” en Bavel, tal vez allí se halle una orden concerniente a la construcción del Beit Hamikdash en Ierushalaim. El texto relata que fue hallado un rollo en el cual el rey Koresh (Ciro) detalla acerca del permiso de construcción del Templo y autoriza a los retornantes del exilio a construir el Beit Hamikdash.
La orden de continuar la construcción a raíz del hallazgo del rollo (versículos 6-12)
Después que Dariavesh vio este rollo, se dirige a Tatnai y le dice que debe concederle el permiso a los retornantes a Tzión para construir el Beit Hamikdash y también para servir allí al Dios de Israel: “Dejen la obra de esa casa de Dios, al gobernador de los judíos y a sus ancianos, para que edifiquen esa casa de Dios en su lugar” (versículo 7)
Culminación de la construcción del Templo y su inauguración como consecuencia de la orden (versículos 13-18)
La orden llega a los constructores del Templo encabezados por Zerubabel y Ieshua y continúan construyendo el Templo con entusiasmo, hasta la finalización de las tareas en el día 13 de Adar del año seis del reinado de Dariavesh. El Templo es inaugurado con gran alegría y se ofrendan cientos de sacrificios a Dios: “Y designaron a los sacerdotes en su servicio, y a los Levitas en sus funciones, conforme al servicio de Dios que está en Ierushalaim, como está escrito en el libro de Moshé” (versículo 18)
Las celebraciones del Pesaj en el Templo (versículos 19-22)
Un mes después de la inauguración del Templo, se puede desarrollar también la festividad de Pesaj en el Templo. L pueblo de Israel se congrega y celebra el Pesaj en la fecha y el momento adecuado, cuando el Beit Hamikdash ya está construido-no hay mayor alegría que esta: “Y celebraron la festividad de las matzot durante siete días con regocijo, por cuanto el Eterno los había alegrado, y había vuelto el corazón del rey de Asiria hacia ellos, para fortalecer sus manos en la obra de la casa de Dios, del Dios de Israel” (versículo 22)
Redacción: Netanel Szpigel.