En los próximos capítulos (36-39) se citan episodios que ya nos son conocidos del libro Melajim, Reyes, y abordan el reinado de Jizkiahu y la expedición de Sanjerib.
El ascenso de Sanjerib (versículo 1)
En el cuarto año del reinado de Jizkiahu, Sanjerib asumió el gobierno en el reino de Ashur (Asiria). Sanjerib era el hijo de Sargón II, quien, según los referentes asirios era el responsable de la caída de Shomrón y la destrucción del reino de Israel. En el libro Yeshaiahu, los conceptos son citados de un modo acotado, pero del libro Melajim se infiere que Sanjerib amenazó a Jizkiahu, y éste se rindió de inmediato y le hizo entrega de una gran ofrenda.
El discurso de Ravshaké (versículos 2-22)
Sanjerib envió emisarios desde Lajish a Ierushalaim “con ejército grande”. Ravshaké (cuyo significado es el encargado de las bebidas, en acadio) se dirigió a los referentes de Jizkiahu (Eliakim, Shevná y Yoaj) y los instó a rendirse ante el rey de Ashur. Ravshaké fundamentó su exigencia, diciendo que el mismo Dios se reveló al rey de Ashur y le ordenó que destruyera Ierushalaim. Los referentes de Jizkiahu le pidieron a Ravsahaké que hablara en arameo y no en hebreo a fin de no agitar e incitar al pueblo, pero Ravshaké, con toda intencionalidad, siguió hablando en hebreo y convocó al pueblo a no escuchar a Jizkiahu. El pueblo no respondió “porque ello era mandamiento del rey, que dijo: "No le respondan". Tras concluir el discurso, Eliakim, Shevná y Yoaj se presentaron ante el rey Jizkiahu con sus vestimentas rasgadas y le transmitieron los conceptos de Ravshaké.