¿Qué tiene de malo una Teshuvá rápida y por temor al castigo? ¿Por qué Hoshea condena este tipo de arrepentimiento y retorno?
El pueblo de Israel desea hacer Teshuvá, emprender el camino del arrepentimiento y retorno: “Vengan, volvámonos al Señor, porque Él ha desgarrado, y nos sanará; Él ha herido, y nos vendará” (Versículo 1). La Teshuvá del pueblo se refleja como un auténtico deseo de arrepentimiento y retorno, a pesar de que dicha Teshuvá esté motivada por el temor a la calamidad.
El profeta les responde con una respuesta sorprendente. No ve con buenos ojos este retorno a Hashem, a Dios, y la expectativa de la salvación, sino que critica al pueblo muy severamente: “Porque quiero la misericordia y no el sacrificio, y el conocimiento de Dios más que los holocaustos, Mas ellos, como hombre vulgar, han transgredido el pacto; allí se han portado traidoramente conmigo” (Versículos 6-7). ¿Cómo es posible que el profeta reprenda al pueblo por ser traidores a Hashem, si ellos desean retornar a Él? ¿Por qué Hoshea critica al pueblo por este deseo?
La respuesta a estos interrogantes se halla explicita en los conceptos del profeta: “Vuestra piedad es como la nube matinal, y como el rocío de la madrugada, que luego desaparece” (Versículo 4)-a pesar de que vuestro deseo de retornar a la buena senda es piedad, es una buena acción, sin embargo, es como una nube que se disipa rápidamente o como el rocío que desaparece de inmediato. Es decir, el pueblo de Israel tiene la expectativa de una Teshuvá rápida, sin un verdadero servicio Divino, algo que no derive en un proceso. Hoshea le pide al pueblo arrepentirse y retornar, y tener conocimiento de Hashem, y no que sea una Teshuvá “instantánea”.
Resumido por el equipo del sitio del Tanaj, extraído de una clase dictada en el Templo “Navá Tehilá”, en Guivat Shmuel.