Linea de tiempo
Zejariá
-
1
Los caballos
Las visiones de Zejaria
-
2
Los cuernos y el hombre que tenía en su mano un cordel de medir
Las visiones de Zejaria
-
3
Iehoshúa el Sumo Sacerdote
Las visiones de Zejaria
-
3
Iehoshúa el Sumo Sacerdote
Las visiones de Zejaria
-
4
El candelabro y Zerubabel
Las visiones de Zejaria
-
5
El rollo, la Efá y las mujeres
Las visiones de Zejaria
-
6
Los carros y la elaboración de coronas
Las visiones de Zejaria
-
7
La cuestión de los ayunos y la respuesta del profeta
La comitiva de Babel y la respuesta del profeta
-
8
Profecía de redención
La comitiva de Babel y la respuesta del profeta
-
9
Castigo a los pueblos y salvación
castigo a los pueblos y salvación
-
10
Salvación para Iosef y Iehudá
castigo a los pueblos y salvación
-
11
Castigo a los pueblos y el episodio del pastor
castigo a los pueblos y salvación
-
12
Castigo para aquellos que acechan a Ierushalaim
castigo a los pueblos y salvación
-
13
La eliminación de los profetas falsos
castigo a los pueblos y salvación
-
14
La guerra de Dios contra los pueblos en Ierushalaim
castigo a los pueblos y salvación
lior
Zejariá 12 Versículo 1
Profecía, la palabra del Señor acerca de Israel. Declara el Señor, que extiende los cielos, pone los cimientos de la tierra y forma el espíritu del hombre dentro de él:
Acorde a la opinión de Rashí y de Radak, luego que el profeta describiera la decadencia y destrucción del segundo Templo, en este capítulo se referirá al bien que le advendrá al pueblo de Israel en el futuro lejano.
Malvim explica que, el espíritu interior del ser humano es el nexo que combina lo celestial con lo terrenal, pues el alma proviene del cielo y el cuerpo de la tierra.
Don Isaac Abarbanel, dice que cuando todos los seres humanos puedan ver y apreciar los milagros que Él obrará en el futuro, todos reconocerán Su grandeza y solo a Él servirán, de esa manera se logrará el objetivo primario de toda la creación: que el ser humano desarrolle su espíritu y se apegue a Dios, transitando por Sus caminos e imitando Sus actos de bondad y justicia.
Zejariá 12 Versículo 2
He aquí, Yo haré de Jerusalem una vasija de veneno para todos los pueblos de alrededor, y cuando haya asedio contra Jerusalem, también lo hará Yehudá.
Los comentaristas opinan que esta metáfora del veneno, hace alusión a que, en aquel entonces, para los enemigos, Jerusalem será como una poción de veneno que terminará liquidándolos y caerán ante ella, pues, al igual que el veneno, con muy poca cantidad, alcanzará para derribar a muchos, así también, a pesar de que el pueblo de Israel sea poco numeroso en comparación con sus enemigos, igualmente podrán contra ellos.
En aquel momento, también los hombres de Yehudá, sufrirán las consecuencias de ese veneno, pues, tal como explican Radak, Metzudat David y Don Isaac Abarbanel, cuando los demás pueblos suban para guerrear contra Jerusalem, primero conquistaran las demás aldeas y ciudades que pertenecen a Yehudá y que están en el camino a Jerusalem, y al caer estas ciudades, los hombres de Yehudá serán tomados como prisioneros. En la antigüedad, los prisioneros eran obligados a luchar junto a sus nuevos amos, es por eso que también los hombres de Yehudá, deberían participar activamente del sitio a la ciudad de Jerusalem.
Esto era un doble golpe para los prisioneros, pues no solo que perdieron su libertad, sus mujeres e hijos y todas sus pertenencias, sino que también deberían luchar contra sus propios hermanos y destruir ellos mismos su propias ciudades y su país; tal como ocurrió en la lucha contra Masada, en donde los romanos pusieron a los propios judíos que fueron tomados prisioneros de la destrucción de Jerusalem, para construir las rampas de asalto a la fortaleza de Masada y que de esa manera, los judíos que estaban dentro de la fortaleza, se vieran en el dilema de tener que matar a sus propios hermanos, y si no lo hacían, entonces los romanos dispondrían de una rampa para tomar la fortaleza y matarlos a todos.
Zejariá 12 Versículo 3
Y sucederá aquel día que haré de Jerusalem una piedra pesada para todos los pueblos; todos los que la levanten serán severamente desgarrados. Y contra ella se congregarán todas las naciones de la tierra.
Continúa la alegoría, diciendo que, aun aquellos pueblos que pretendan levantarse contra Jerusalem y sitiarla, les será muy pesado ese proyecto, hasta el punto tal que se debilitarán y se perjudicarán mucho.
Radak dice que, aquellos que puedan sobrevivir al “veneno” que había mencionado en el versículo anterior, la lucha contra Jerusalem les será sumamente pesada, tal como una piedra pesada, que, por más que pueda alzarla durante un rato, no podrá mantenerla así por mucho tiempo, pues le causará grandes dolores.
Don Isaac Abarbanel agrega que, si bien antiguamente fue relativamente fácil conquistar Jerusalem, y básicamente todos los que salieron contra ella han podido (como en el caso de las cruzadas), en el futuro esto no será así, sino que les será extremadamente difícil tomar la ciudad.
Zejariá 12 Versículo 4
En aquel día, declara el Señor, heriré a todo caballo con pánico, y a su jinete, de locura. Pero sobre la casa de Yehudá abriré Mis ojos, y heriré de ceguera a todo caballo de los pueblos.
Todo el ejército enemigo será apabullado. Los caballos saldrán espantados y sus jinetes no podrán dominarlos, algo indispensable en el campo de batalla, pues si los caballos corren cada cual para su lado sin ningún orden, se rompen las filas del ejército y son fácilmente derrotados.
Como si eso fuera poco, además Dios hará que los jinetes y los comandantes se lancen al ataque perdiendo toda lógica y estrategia de guerra, lo que los hará vulnerables y fácil de ser vencidos.
No obstante, con respecto a los de Yehudá que fueron cautivados y obligados a unirse al enemigo en el asedio contra Jerusalem, a ellos no les sucederá nada, pues Dios los protegerá, no obstante, los enemigos actuarán en forma desordenada y sin estrategia, sin ver quien está junto a su lado ni quien está contra él, y finalmente caerá ante el pueblo de Israel.
Zejariá 12 Versículo 5
Entonces los jefes de Yehudá dirán en su corazón: "Sed fuertes, oh habitantes de Jerusalem, (apoyaos) en el Señor de los ejércitos, vuestro Dios."
Acorde a la opinión de Rashí, los de Yehudá, que fueron obligados por sus conquistadores a tener que luchar contra Jerusalem, ellos suplican a los habitantes de Jerusalem que sean fuertes, que no desfallezcan y que rueguen a Dios.
Metzudat David, en cambio, sostiene que, al ver los hombres de Yehudá que a ellos no les ocurría nada mientras que a los enemigos, aquellos que los habían cautivado, estaban perdiendo y sus caballos salían despavoridos, y sus generales actuaban en forma irracional, entonces se percataban que era Dios el que estaba haciendo eso y luchaba por ellos, y por eso decían en sus corazones, que seguramente, la gente de Jerusalem, había implorado a Dios para que acuda en su ayuda.
Radak explica que esto debían decirlo en su corazón, pues al ser que eran cautivos, no podían demostrar ante sus amos que estaban contentos con esa situación.
Daat Mikrá dice que, en realidad, los de Yehudá imploran a Dios, que a pesar de que ellos deben luchar en contra de Jerusalem, que era su ciudad, le piden a Dios que la fortalezca para que no caiga vencida.
Zejariá 12 Versículo 6
En aquel día haré de los jefes de Yehudá como brasas de fuego entre leños, y como antorcha ardiendo entre gavillas, y consumirán a diestra y a siniestra a todos los pueblos de alrededor, y Jerusalem será asentada de nuevo en su lugar, en Jerusalem.
Tal como una brasa de fuego enciende y quema todo a su alrededor, así los hombres de Yehudá, que estaban sometidos y bajo cautiverio de los demás pueblos, que los obligaron a ir en medio de ellos a luchar contra Jerusalem, se revelarán, destruirán a esos enemigos tal como un tizón de fuego que está rodeado de leña y heno que quema y destruye todo y consumirán a diestra y a siniestra a todos los pueblos de alrededor.
Entonces, Jerusalem será reconstruida y asentada en el mismo sitio en que siempre estuvo. No es que se reconstruirá en otro lugar lejano, tal como ha sucedido con muchas ciudades cuyos habitantes la reconstruyeron en otro sitio o país, como York y Nueva York, Jersey y Nueva Jersey, Orleans y Nueva Orleans, etc.
Debemos recordar, que, en la época Romana, cuando la ciudad de Jerusalem fue destruida, el malvado emperador Tito, mandó a destruir Jerusalem hasta sus cimientos y que sea arada como un campo, de forma tal que no quede ningún vestigio de ella.
Más aun, el tirano emperador Adriano, en el año 131, cambió el nombre de la ciudad y la llamó Aelia Capitalina (Aelia deriva del nombre propio de Adriano, Aelius, mientras que Capitolina significa que la ciudad nueva se dedicaba a los dioses de la Tríada Capitolina, entre ellos Júpiter, cuyo templo en Roma se encontraba en la Colina Capitolina).
No obstante, “las ironías de la historia” o, mejor dicho: la mano de Dios, hizo que de las ciudades romanas o de la religión y mitología romana, no quede nada, mientras que la ciudad de Jerusalem persiste, en el mismo sitio y con los mismos valores de siempre.
Zejariá 12 Versículo 7
El Señor salvará primero las tiendas de Yehudá, para que la gloria de la casa de David y la gloria de los habitantes de Jerusalem no se engrandezca sobre Yehudá.
Rashí explica que primero Dios ayudará a los de Yehudá que habían sido obligados a sitiar Jerusalem y se liberarán de sus opresores y podrán regresar a sus tiendas. Y recién después, los de la casa de David y los habitantes de Jerusalem saldrán a luchar y derrotarán a sus enemigos. Para que, de esta manera, no se engrandezcan los de Jerusalem sobre los hombres de Yehudá, diciendo que fueron ellos quienes salvaron a los de Yehudá.
Don Isaac Abarbanel dice que, cuando dice: Yehudá, se refiere a la tribu de Yehudá, y cuando dice: la casa de David y los habitantes de Jerusalem, se refiere al resto del pueblo de Israel que tendrá su capital en Jerusalem y serán regidos por la casa de David.
Comentaristas contemporáneos, dicen que esto se refiere a que, en primer lugar, Dios salvará y liberará a las ciudades del resto del país, para que de esta manera sean pobladas y reedificadas y recién después de esto, liberará y reconstruirá a Jerusalem, para que, de esta forma, el resto de las ciudades sean también reconstruidas y pobladas y no solamente Jerusalem. Y así ocurrió en nuestros días, ya que, en el año 1948, si bien los judíos pudieron declarar la independencia de Israel y crear el estado, no obstante, no pudieron liberar a la ciudad de Jerusalem de manos del enemigo, sino hasta 20 años después en 1967. Esto causó que se desarrollen y se pueblen ciudades por doquier, y recién después, Jerusalem fue liberada, reconstruida y habitada nuevamente.
Zejariá 12 Versículo 8
Aquel día el Señor defenderá a los habitantes de Jerusalem, y el débil entre ellos aquel día será como David, y la casa de David será como Dios, como el ángel del Señor delante de ellos.
Metzudat David dice que se refiere a que el más débil dentro de los guerreros será tan fuerte y valiente como lo era el rey David. Y el ejército en general, será tan poderoso como las huestes celestiales.
Zejariá 12 Versículo 9
Y sucederá en aquel día, que buscaré destruir a todas las naciones que vengan contra Jerusalem.
Rashí, dice que, en aquel día, Dios buscará e indagará si tienen algún mérito o justicia aquellos pueblos que vienen contra Jerusalem, en caso de que no sea así, entonces serán destruidos por Dios.
Zejariá 12 Versículo 10
Y derramaré sobre la casa de David y sobre los habitantes de Jerusalem, el Espíritu de gracia y de súplica, y me mirarán a Mí. Al que ha caído, se lamentarán por él, como quien se lamenta por su hijo único, y llorarán por él, como se llora por un primogénito.
Los comentaristas, dicen que esto se refiere, a que, en aquel momento, el pueblo se volverá a Dios, le rogará y hallarán gracia ante Dios quien les responderá.
No obstante, habrá grandes pérdidas y caídos en el pueblo, es por eso que se lamentarán y llorarán amargamente por el dolor y calamidad que ha ocurrido.
Los comentaristas clásicos, dicen que, esta gran lamentación, se refiere al Mashiaj ben Yosef , es decir, antes que surja el Mashiaj duradero, que pertenecerá a la dinastía de David, surgirá otro salvador y líder de Israel que los guiará a la victoria e independencia nacional, pero este gran líder no pertenecerá al linaje de David, y en determinado momento morirá antes de concluir completamente su cometido, y recién después surgirá el Mashiaj de la casa de David que logrará su cometido y se establecerá por muchos años, él y sus hijos que lo sucederán.
Con respecto a este punto, hay quienes se cuestionan ¿cómo es factible que el Mashiaj ben Yosef, (que es una hombre justo y temeroso de Dios) muera sin que Dios lo proteja? Ante este dilema, responden los sabios que a veces es factible que una buena persona tenga que caer, para que el pueblo lo valore y cambie de actitud; a eso se refieren cuando dicen que murió por el pecado del pueblo; Dios hubiera preferido que permanezca con vida y que el pueblo cambie su forma de actuar, pero no siempre ocurre así. Muchas veces, Dios envía al pueblo líderes y sabios buenos, pero el pueblo no está dispuesto a aceptarlos o seguirlos, y así se hacen pasibles de ser derrotados ante el enemigo y sufrir todos juntos las consecuencias.
Otros comentaristas modernos, sostienen que esta gran angustia que sufrirá el pueblo se debe a los horrores del holocausto y los millones que fueron asesinados brutalmente, lo cual producirá un dolor y pena tan grande en el pueblo, que lo recordarán solemnemente, como si cada familia hubiera perdido un familiar amado en esa horrible y macabra pesadilla que el nazismo llevó a cabo.
Zejariá 12 Versículo 11
En aquel día habrá gran lamentación en Jerusalem, como la lamentación de Hadad-Rimón en la llanura de Meguido.
Los comentaristas concuerdan con que este versículo se refiere a un gran sepelio que había ocurrido en el pasado, y que, por su magnitud, fue utilizado como comparación.
Esta es la séptima vez que dice: En aquel día… En la Tora no es casual el número 7. Hay quien quiere ver en esa repetición, que esta profecía por parte de Dios es algo firme y seguro que sucederá, es por eso que recalca siete veces aquel día.
Zejariá 12 Versículo 12
Y se lamentará la tierra, cada familia por su cuenta: la familia de la casa de David por su lado, y sus mujeres por su lado; la familia de la casa de Natán por su lado, y sus mujeres por su lado;
Será un duelo solemne en que cada familia participará, no solamente la familia o tribu de la que era miembro el fallecido, sino que todo el pueblo participará.
Los hombres y las mujeres cada cual por su lado, pues será con mucha santidad, como cuando se está en el Templo, en donde hombres y mujeres se ubican en lugares separados.
Además, porque no será algo que solo les incumba a los hombres o a las mujeres, sino a ambos.
Zejariá 12 Versículo 13
la familia de la casa de Leví por su lado, y sus mujeres por su lado; la familia de Shimhí por su lado, y sus mujeres por su lado;
Todos los estratos sociales participarán en este luto, ya sea la realeza con los descendientes de la dinastía de David, como los Leviim que servían en el Templo, o las familias de renombre.
Zejariá 12 Versículo 14
todas las familias que subsistan, cada familia por su lado, y sus mujeres por su lado.
Además de las familias famosas que antes mencionó, también estarán de luto todas las familias del pueblo, aun las menos prestigiosas.