¿Dónde hay más personas como este hombre?

¿Dónde hay más personas como este hombre?

¿Qué sorprende más? ¿La actitud de las personas de Beit Lejem hacia Naomí y Rut o la actitud de Boaz hacia ellas?

Lamentablemente, la reacción de la gente de Beit Lejem no nos puede sorprender. Por un lado, “Y aconteció que a su entrada en Beit Lejem, se puso en conmoción toda la ciudad a causa de ellas; y decían (las mujeres): “¿Será ésta Naomí?” (Capítulo 1, versículo 19); y por el otro, aparentemente murmurando-“¿Quién es la que vino con Naomí”? –“La Moabita” (Capítulo 1, versículo 22). ¿Han visto a la Moabita? ¿La escucharon? No sólo que se fueron a Moab en el período de hambruna y murieron allí, sino que además nos trajo a la Moabita, que encontró allí el difunto Majlón.

¿Y por qué Naomí y Rut se encontraban solas en la casa de Elimelej y no tenían nada para comer? Porque nadie estaba dispuesto a permitir el ingreso de la Moabita a su hogar.

La Meguilá, el libro Rut, alude a esta atmósfera destacando en 3 oportunidades la palabra “Moabita” (Capítulo 1, versículo 22; capítulo 2, versículo 2; capítulo 2, versículo 6), y precisamente en esta etapa- “De esta suerte volvió Naomí, y Rut, la moabita, su nuera, con ella, cuando ella volvió del país de Moab”… “Y dijo Rut, la moabita a Naomí: “Me iré, si te parece, al campo, y recogeré espigas en pos de cualquiera, en cuyos ojos yo hallare gracia.” Y ella dijo: “Anda, hija mía.”… “Entonces dijo Boaz al criado suyo que era el sobrestante de los segadores; “¿De quién es aquella joven? Y respondió el criado, sobrestante de los segadores, y dijo: la joven moabita que volvió con Naomí del país de Moab

La Meguilá insinúa y hace referencia a que la misma Rut se siente extraña en Beit Lejem, en forma alusiva ante Naomí y en forma explícita ante Boaz, y ambos le respondieron con la misma palabra y sin hablar entre ellos, la denominaron “mi hija”.

Esta actitud por parte de Naomí es muy comprensible, ya que Rut es como una hija, es el único nexo con vida que le queda con su esposo e hijos fallecidos, pero ¿cómo se entiende la actitud de Boaz, un tío anciano: “¿No oyes, hija mía?” (Capítulo 2, versículos 8-9), conmigo tienes condiciones especiales…).

“¿Por qué he hallado gracia a tus ojos, para que hagas caso de mí, extranjera como soy?” (Capítulo 2, versículo 10)-He escuchado acerca de ti, sobre las buenas acciones que hiciste para con Naomí, para mí, eres parecido a nuestro patriarca Abraham, “Muy por menudo se me ha referido, cuánto haz hecho para con tu suegra, después de la muerte de tu marido; y cómo has dejado a tu padre y a tu madre y la tierra de tu nacimiento, y has venido a un pueblo que no conociste antes; ¡Recompense el Señor tu obra; y tengas un cumplido galardón de parte del Señor, el Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a poner tu confianza” (Capítulo 2, versículos 11-12)-no eres una extranjera.

Boaz fue el primero en aceptar a Rut en forma plena, como si él mismo hubiera escuchado lo que ella le expresara a Naomí-“tu pueblo es mi pueblo, y tu Dios mi Dios… así me haga el Señor, y más aún, que (sólo) la muerte separará entre mí y ti…” (Capítulo 1, versículos 16-17)

Rut, la viuda y la conversa (aún antes de la aprobación de los Sabios de la ciudad) que escuchó por primera vez en su vida palabras de consuelo, sin embargo, todavía se sentía inferior a una “sierva”, se sentará a comer “al lado de los segadores”, y también recogerá espigas “entre las gavillas” (Capítulo 2, versículos 14-15), en el sitio del cual se aleja a todos los otros pobres, no olvidó por un instante que Naomí se halla en la casa, con hambre.

“Entonces ella sacó y le dio lo que le había sobrado después de saciada” (Capítulo 2, versículo 18). Cuando leo este versículo, me caen las lágrimas…¿Acaso hay en Beit Lejem otro hombre como Boaz?

Gentileza  del sitio 929.

 

 

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