Con la orden de quitarse su calzado, Dios quiso que Yehoshua y el pueblo de Israel asimilaran la enorme importancia del momento y la comprensión de que las misiones que tienen por delante, son sagradas y deben ser afrontadas seriamente y con una reverencia significativa.
En nuestro capítulo se describe el encuentro de Yehoshua con el comandante del ejército del Eterno, quien le ordena quitarse el calzado ya que él se encuentra en un sitio sagrado: “Y le dijo el comandante del ejército del Eterno a Yehoshua: Quítate el calzado de tus pies, pues el lugar en donde tú estás parado, sagrado es. “ (Versículo 15).
Un hecho similar encontramos en el comienzo del libro Shemot (Capítulo 3, versículo 5):” Dijo, no te acerques aquí, arroja tus calzados de sobre tus pies, ya que el lugar en que tú estás de pie, en él, tierra consagrada es.”
Pero en ese caso, el mandamiento tuvo lugar en el marco de la revelación de Dios a Moshé a fin de comprometerlo para que libere al pueblo de Israel de Egipto, y para que no se acerque al lugar de la revelación de Dios, el ángel de Dios le ordenó que no se aproximara a la zarza, y que se quitara sus calzados.
Mas en nuestro capítulo el mandamiento parece aparentemente desconcertante, ya que el ángel no le ordena ni le anuncia nada a Yehoshua, a excepción de instruirlo para quitarse su calzado, y por ende no se comprende ¿por qué le indica hacer eso, si no hay ninguna revelación divina en el lugar donde se halla Yehoshua en ese momento, y entonces, por qué es considerado sagrado?
Parece que en este hecho, Dios quiso que Yehoshua y el pueblo de Israel asimilaran la enorme importancia del momento, esas misiones para la conquista de la tierra, el asentamiento en ella, y la purga (depuración) de los pueblos malvados que la habitaban, estas son misiones sagradas que deben ser ejecutadas seriamente y con significativa reverencia, y por ello en el momento en que Yehoshua se dispone a prepararse para la primera batalla por la tierra, sobre Ierijó, se le solicita que se quite su calzado, porque esta tierra por la que él habrá de luchar, es tierra santa, la tierra sagrada en la que se cumplen íntegramente los preceptos. Y puede que por ello Yehoshua haya recibido la orden de quitarse solo un calzado (tu calzado de tu pie) y no como Moshé que recibió la orden de quitarse sus dos calzados (tus calzados de tus pies), ya que Moshé se hallaba en el lugar de la morada de la divinidad, y por ello fue ordenado a trasladarse descalzo, tal como se descalzan aquellos que ascienden al monte de la casa de Dios, el lugar de morada de la divinidad. Pero Yehoshua recibió la orden de hacer esto como un acto simbólico con la intención de avivar la santidad de toda la tierra, y por ello con quitarse un calzado ya lo estaba manifestando.