Linea de tiempo
Ezrá
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1
La Aliá de Zerubabel y Yeshúa
La primera Aliá y la construcción del Gran Templo
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1
La declaración de Koresh y el ascenso de Shashbatzar
La primera Aliá y la construcción del Gran Templo
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1
La Aliá de Zerubabel y Yeshúa
La primera Aliá y la construcción del Gran Templo
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3
La construcción del altar y los cimientos del templo
La primera Aliá y la construcción del Gran Templo
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4
Los que acechan a Iehudá y Biniamín y la interrupción de la construcción
La primera Aliá y la construcción del Gran Templo
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5
Culminación de la construcción del Gran Templo y su inauguración
La primera Aliá y la construcción del Gran Templo
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6
Culminación de la construcción del Gran Templo y su inauguración
La primera Aliá y la construcción del Gran Templo
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7
La Aliá de Ezrá
Los recuerdos de Ezrá
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8
La Aliá de Ezrá
Los recuerdos de Ezrá
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9
La plegaria de Ezrá
Los recuerdos de Ezrá
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10
Expulsión de las mujeres extranjeras
Los recuerdos de Ezrá
lior
Ezrá 9 Versículo 1
Los comentaristas sostienen que todo esto ocurre aproximadamente unos cinco meses después de haber llegado, es decir en el mes hebreo de Kislev, esto lo vemos de lo que dice en el próximo capítulo en los versículos 8 y 9.
Acorde a la opinión de Daat Mikra, cuando dice: Y acabadas estas cosas se refiere a que lo más probable es que Ezra durante esos cinco meses estuvo abocado en la tarea que le había impuesto el rey de nombrar jueces y magistrados, tal como dijo antes en 25 y 26: Y tú, Ezrá, conforme a la sabiduría de tu Dios que te fue concedida, designa jueces y funcionarios, que gobiernen a todo el pueblo que está del otro lado del río, es decir a todos los que conocen las leyes de tu Dios; y al que no las conoce, se las enseñaréis. Y cualquiera que no hiciere la ley de tu Dios, y la ley del rey, prestamente sea juzgado, ya sea para muerte, o para destierro, para confiscación de bienes, o para prisión.
haciendo conforme a las abominaciones de los Cnaanim en el hebreo Bíblico se suele utilizar el término: abominaciones para referirse a pecados como idolatría, incestos o relaciones sexuales prohibidas, y asesinatos. Todas estas eran costumbres muy típicas de los pueblos que habitaban la tierra de Cnaan. Es lo que la Tora nos dice en Vaikrá 18:3 como los actos de los de la tierra de Cnaan, adonde Yo os conduzco, no hagáis y no os encaminéis en sus costumbres. Mis preceptos y leyes cumpliréis y en ellas transitareis. Yo soy el Eterno vuestro Dios. E inmediatamente después desde el versículo 6 al 23 enumera todas las prohibiciones sexuales para el pueblo de Israel, una vez finalizada esta lista dice en el versículo siguiente 18:24: pues con todas estas cosas se han impurificado aquellos pueblos que Yo destierro ante ustedes… pues todas estas abominaciones han hecho los habitantes de la tierra de Cnaan…
Es por eso que menciona justamente a estos pueblos a los Cnaanim, los Jitim, los Perizim, los Iebusim a pesar que esos pueblos ya habían desaparecido, fueron destruidos por Yehoshua y los posteriores reyes de Israel, justamente los menciona pues a ellos hace alusión en el versículo Bíblico. Los otros tres pueblos que menciona: los Amonim, de los Moabim, de los egipcios son pueblos que la Tora dijo que no podían pasar a formar parte del pueblo de Israel. Lo que Ezra quiere demostrar con esto es que la prohibición de contraer matrimonio, no es solamente con esos pueblos, sino, con todos los no judíos, pues el motivo que expuso la Tora en Shemot 34:16 para esta prohibición es: harán desviarse a tus hijos tras esos dioses y esa consecuencia se cumple no solamente con estos pueblos, sino con cualquier pueblo no judío, esto es lo que dice el Talmud en el tratado Kidushim 68 b.
Ezrá 9 Versículo 2
El comentarista Ralbag, sostiene que aparentemente las tomaron como esposas sin haberlas convertido previamente.
La Tora ya había advertido explícitamente en Shemot 34:16 No tomaréis a sus hijas para tus hijos como esposas, pues al prostituirse sus hijas en pos de los dioses paganos, harán desviarse a tus hijos tras esos dioses.
Esto hace que nos cuestionemos ¿Cómo es factible que lleguen a cometer esta transgresión? ¿Cómo es posible que Zerubabel y Yeshua el sumo sacerdote, hayan permitido esto? Lo primero que debemos aclarar es que ya habían pasado aproximadamente 60 años desde que Zerubabel y Yeshua habían llegado a la tierra de Israel. Lo más probable es que ya habían fallecido, en Ezra 10:6 vemos que el sumo sacerdote era Yehonathan hijo de Eliashiv que era el nieto de Yeshua. Lo más probable es que, los reyes de Persia no hayan permitido que los descendientes de Zerubabel, que pertenecía a la dinastía del rey David, continúen en el poder, lo más factible es que, hayan designado a gobernadores persas, y éstos, lógicamente, hayan fomentado la asimilación y casamiento con otros pueblos.
Con respecto a la insólita actitud adoptada precisamente por los príncipes y dignatarios de tomar como esposas a mujeres no judías, los comentaristas sostienen que ellos, (tal vez ingenuamente) consideraron que la Tora prohibió contraer matrimonio solamente con los pueblos que especifica literalmente, pero con los demás, pueblos venidos de otras latitudes no recaía esta prohibición. Vemos que Ezra era consciente de esta forma de pensar de ellos, es por eso que, en el próximo capítulo, en el versículo 189, les ordena a todos ellos a traer una ofrenda que es la que se trae cuando alguien comete una transgresión sin querer.
Ezrá 9 Versículo 3
La rasgadura de la vestimenta es un acto que denota un profundo dolor e impotencia, es por eso que las personas que guardan luto por un ser querido que ha fallecido, se rasgan las vestiduras en señal de dolor, duelo y congoja.
Ezra está muy dolido y atónito por lo que le acaban de informar. Él había venido desde Babel con la ilusión de que iba a expandir y fortificar la Tora, y el rey le había dado la autoridad para ello; pero en lugar de ello, Ezra se choca con la realidad desesperante y caótica de que el pueblo está en un nivel de asimilación y debilitamiento espiritual muy lejos de lo que él había imaginado; por lo tanto, lejos de poder ocuparse de propagar los preceptos y el estudio de la Tora, debe ocuparse de cuestiones de lo más básicas y el peligro de que el pueblo de Israel, se asimile y desaparezca.
Al rasgarse las vestiduras, no solo denota el profundo dolor que siente ante esta situación del pueblo de Israel, sino que también les demuestra al pueblo la gravedad de sus actos, pues no era algo usual que el dirigente espiritual del pueblo se rasgue las vestiduras y se siente de luto y ayuno, sino que una cosa así solamente era adoptada ante una situación grave y crítica.
Ezrá 9 Versículo 4
Probablemente se refiere a aquellos que habían subido junto con Ezra, desde Babel y que se habían mantenido fieles y evitando asimilarse, también ellos están atónitos y consternados por la situación del pueblo judío que habitaba en la tierra de Israel.
ante la palabra del Dios de Israel El temor que los embargaba es porque ellos eran conscientes de que el pueblo de Israel, al volver a asentarse en sus tierras falló en este punto; violando la prescripción de Dios: No tomaréis a sus hijas para tus hijos como esposas, por lo tanto el pavor que ellos tenían es que esta actitud los hacia pasibles del enojo Divino y que Dios ya les había advertido acerca de sus consecuencias en Bamidbar 33:56; será que tal como pensé hacerles Yo a ellos, así les haré Yo a vosotros es decir, serían exiliados de su tierra, es lo que dice luego Ezra en el versículo 14: ¿hemos de quebrantar de nuevo tus mandamientos emparentándonos con los pueblos que cometen estas abominaciones? ¿Acaso no Te enojarías con nosotros hasta destruirnos, sin que quedara remanente ni quién escapara?
y estuve sentado entristecido hasta la ofrenda de la tarde esto es aproximadamente hasta la tercera hora después del mediodía.
Ezrá 9 Versículo 5
Hay entre los comentaristas quienes sostienen que Ezra se levanta para hablar en voz alta, y lo primero que hace es volver a rasgarse sus vestiduras para agregar más dramatismo a su discurso y demostrarles que lo que les dice sale desde lo profundo de su dolor.
Ezrá 9 Versículo 6
Si bien Ezra dirige su ruego y súplica a Dios, lo hace en voz alta, para que todo el pueblo de Israel pueda oír y ser conscientes de su pecado y la gravedad de los hechos.
estoy avergonzado y abochornado para poder elevar mi rostro hacia Ti, mi Dios Tratemos de imaginarnos la sensación de Ezra, él se había preparado, ilusionado y hasta soñado con que finalmente el pueblo de Israel se instalaría en su tierra, reconstruiría el santuario y volvería a regirse por los preceptos de Dios, logrando el ideal que la Tora aspira: que Israel se transforme en un modelo y ejemplo de pueblo, con una alta escala de valores, viviendo en una sociedad justa y sabia, lejos del paganismo, oscurantismo y todo tipo de depravaciones, disfrutando de una vida material feliz y sana, pero a la vez desarrollando plenamente su espiritualidad, apegándose a Dios como valor supremo y trascendiendo más allá de esta vida, hasta hacerse merecedores del mundo por venir.
Éste era el pensamiento y proyecto de Ezra, y para eso le rogaba a Dios y le imploraba que mejorase la situación de los judíos. Cuando se concientiza del estado que está el pueblo, se da cuenta que no tiene lo qué pedir a Dios y hasta se avergüenza de la situación en que está sumido el pueblo elegido, tan distante de lo que Dios había vislumbrado para ellos.
Ezrá 9 Versículo 7
Ezra habla en plural, él asume la defensa del pueblo y se transforma en su voz.
Lo primero que hace es reconocer el error, en ningún momento justifica la situación, sino que asume la culpa. Este es un principio básico en el judaísmo. Nada es producto de la casualidad o culpa de los demás, todo lo que nos sucede es fruto y consecuencia de nuestros actos.
Esta actitud viene acarreándose no solamente desde esta generación, sino que es algo que viene desde hace tiempo, por lo tanto, no es de sorprender que el pueblo de Israel haya sido sometido y exiliado.
como en este día Si bien habían alcanzado un grado de autonomía y libertad de culto, aún estaban distantes de una situación ideal, pues la mayoría del pueblo seguía aun en el exilio y no disponían de un rey propio ni de un estado independiente, sino que estaban supeditados al reino persa que les imponía limitaciones.
Ezrá 9 Versículo 8
Tal como dijo en el versículo anterior, a causa de todo lo que ha pecado el pueblo, en realidad ni siquiera son merecedores de esta pequeña redención que Dios ha obrado para ellos. Pero a pesar de ello, Dios ha actuado con ellos benévolamente y les ha otorgado un momento de respiro en medio de la opresión del sometimiento a otros pueblos que solo velan por su propio beneficio y bienestar, muy lejanos de los valores y costumbres judíos.
para que nuestro Dios ilumine nuestros ojos y nos conceda un poco de vida en medio de nuestra esclavitud Para el pueblo judío, poder volver a sus valores, y regirse con justicia y verdad, es la luz que ilumina su vida.
Lo peor de la esclavitud para el pueblo judío, no es solamente estar sometidos a otros hombres, sino el hecho de tener que estar supeditados a los caprichos y desmanes de hombres bajos, cuya escala de valores es similar a la de las bestias del campo, de esta manera, el alma del judío, que está consagrada a aspirar la grandeza espiritual, se ve obligada a estar hundida en el barro de este mundo y sometida a valores muy distantes de los elevados conceptos de la Tora.
Ezrá 9 Versículo 9
A pesar de estar formalmente aun en el exilio bajo el dominio extranjero, Dios no los ha abandonado.
Tienen ahora una pequeña oportunidad de reparar su situación y que el pacto con Dios se reestablezca.
Ezra ve que una pequeña ventana se abre, a pesar de que no todo el pueblo regresa a su tierra, hay un remanente que puede hacer que todo vuelva a germinar y florezca nuevamente el pueblo de Dios.
¿Cómo lograrlo?
En la Tora, Vaikrá capítulo 26, cuando nos habla acerca de los castigos que Dios enviará al pueblo por abandonar los preceptos, nos dice allí también la manera en que el pacto, que estaba quebrado, volvería a reestablecerse.
Allí en Vaikrá, la Torá nos dice cómo será el camino de regreso: primero tienen que hacer Vidui, es decir reconocer. ¿Pero qué es lo que deben recapacitar? Dos cosas deben reconocer: 1) Que no cumplieron los preceptos, 2) Que se comportaron obstinadamente con Dios, es decir, no solo que dejaron de cumplir, sino que se rebelaron duramente, en forma obstinada y persistente. Entonces deben reconocer que la postura de rebeldía y altanería estuvo mal y además asumir que cometieron un pecado.
Vemos que para la Torá es importante que aceptemos el castigo, es decir, para poder hacer Teshuvá -arrepentirnos sinceramente y corregirnos, es importante que sepamos que nuestras acciones traen consecuencias (y esto tal vez lo va a ayudar a mantenerse en el camino correcto, aunque sea que lo haga solo por el temor al castigo)
Esto es lo que hace Ezra en el versículo 7.
Si continuamos con lo que cita en Vaikrá 26, enseguida nos dice que Dios va recordar Su pacto que hizo con los patriarcas y recordará a la tierra.
¿Qué significa que Dios recuerda el pacto? Esto se refiere a que luego de que se cumplen los primeros tres pasos, recién entonces el pacto con Dios se reestablece, de lo contrario el pacto continúa roto-suspendido. No se trata de que ellos comienzan a cumplir los preceptos como si nada hubiera pasado y automáticamente Dios les envía la recompensa por el cumplimiento de los preceptos; no es así como funciona, sino que hacen falta los tres pasos que antes mencionó para que el pacto se restablezca y que Dios envíe Su bendición por el cumplimiento de los preceptos y transitar por Sus caminos.
Como todo pacto, hay dos partes. Si el pueblo cumple su parte, entonces Dios cumple la suya. Pero no obligatoriamente debería ser así, sino que esto es un acto de bondad por parte de Dios. En primer lugar, Dios no estaba obligado a hacer un pacto con el pueblo de Israel, normalmente cuando dos partes hacen un pacto es porque ambas partes precisan algo de la otra y de esa manera se benefician mutuamente y el pacto es de conveniencia para los dos, pero en el caso de Dios no es así, pues Él no precisa de nada. El segundo punto es que cuando hay un pacto, una vez que se rompe, no quiere decir que luego se renueva automáticamente.
Entonces la Torá nos relata que a causa de no haber respetado los preceptos y no haber transitado por los caminos de Dios, fueron llevados al exilio.
Los preceptos, entre otras cosas nos enseñan que Dios es el dueño de la tierra. El exilio nos enseña que el hombre no es el dueño de la tierra y que, así como ellos despreciaron los preceptos de Dios, entonces la tierra los desprecia a ellos. El problema es que el hombre se cree que él es el dueño y hace lo que se le place (decide dejar de cumplir los preceptos) y cuando actúa de esa manera, es muy difícil que pueda reconocer a Dios.
Cuando salen al exilio entonces experimentan qué significa no poseer nada y no ser dueño de nada. Entonces lo lógico será que vuelvan a reconocer quién es el dueño de todo y vuelvan a cumplir Sus preceptos, de esta manera serán meritorios de poseer la tierra de Israel.
Ezra, tal como dijimos, ve que una pequeña ventana se abre, hay una pequeña esperanza para que todo vuelva a germinar y florezca nuevamente el pueblo de Dios.
Cuando el pueblo reconoce y no desprecia a Dios, entonces Dios se muestra con ellos de la misma manera y ya no los desprecia. El pacto puede volver a ser restablecido y entonces a partir de ahora si ellos van en el camino de Dios serán recompensados y entonces de a poco la situación irá cambiando hasta volver a la plenitud en la tierra de Israel.
Ezrá 9 Versículo 10
Pero a pesar de esa ventana de esperanza y luz que Dios les abre, haciéndoles hallar gracia ante los reyes de Persia para que les permitan que se instalen en la tierra, el pueblo se asimila y se mezcla con las demás naciones.
Ezrá 9 Versículo 11
Se refiere a lo que dijo en Shemot 34:16 No tomaréis a sus hijas para tus hijos como esposas, pues al prostituirse sus hijas en pos de los dioses paganos, harán desviarse a tus hijos tras esos dioses.
Bamidbar 33:56; será que tal como pensé hacerles Yo a ellos, así les haré Yo a vosotros
También lo que dijo por intermedio de los profetas: Iejezquel capítulos 22, 23 y 36, en Mijá 2:10, Irmiahu capítulo 2 etc.
impurificada con la inmundicia de los pueblos de estas tierras, que la han colmado con sus abominaciones e impurezas, de un extremo a otro se refiere a lo que dice en Vaikrá 28:24 pues con todas estas cosas se han impurificado aquellos pueblos que Yo destierro ante ustedes… pues todas estas abominaciones han hecho los habitantes de la tierra de Cnaan…
Ezrá 9 Versículo 12
Dios les había encomendado en la Tora en varias oportunidades: en Shemot 34:16 No tomaréis a sus hijas para tus hijos como esposas, pues al prostituirse sus hijas en pos de los dioses paganos, harán desviarse a tus hijos tras esos dioses
Como así también en Debarim 7:2-4: No harás alianza con ellos ni buscarás el bien de ellos. Y no contraerás matrimonio con ellos; no darás tus hijas a sus hijos, ni tomarás sus hijas para tus hijos. Porque ellos apartarán a tus hijos de Mi para servir a otros dioses; entonces la ira del Eterno se encenderá contra ti, hasta exterminarte prontamente.
El hecho de contraer matrimonio con otros pueblos es problemático por varios aspectos.
El primero y principal tiene que ver con la asimilación y desaparición del pueblo de Israel y con eso se extinguiría el pacto que Dios hizo con el pueblo. Debemos recordar que el proyecto Divino para la humanidad, es establecer una sociedad ideal, con valores supremos, basada en la justicia y equidad y obrando bondad y misericordia, aferrándose a los valores verdaderos y a Dios, de esa forma logrará una vida armónica y placida en este mundo, como así también una vida espiritual plena alcanzando el apego a Dios y la vida en el mundo venidero. Es por eso que es primordial que vivan conforme a las leyes que Dios, Creador de todo, les entregó en la Tora (tal como las instrucciones de uso correctas que brinda cualquier fabricante), sin tener ninguna influencia de ninguna otra cultura o pueblo, es por eso que dice: No harás alianza con ellos ni buscarás el bien de ellos.
Este ideal se lograría primeramente con un solo pueblo, en este caso el pueblo de Israel, y luego, las demás naciones, querrán imitarlos, de esta forma el pueblo de Israel se transformaría en una luz para las naciones, un maestro y ejemplo que inspirará a los demás pueblos a seguir su camino, de esta forma, todo la humanidad logrará alcanzar ese objetivo elevado, es lo que dice el profeta Zejariá (que era contemporáneo de Ezra) en 14:9: Y será el Eterno Rey sobre toda la faz de la tierra, en aquel día el Señor será Uno y Su Nombre Uno Esta idea está reflejada en el texto Aleinu Leshabeaj que se utiliza para concluir todas las oraciones: Perfeccionar el mundo bajo el Reino del Todopoderoso. Todo ser vivo invocará Tu Nombre, enderezando hacia Ti, a todos los malvados de la tierra. Conocerán y sabrán, todos los habitantes del mundo, que ante Ti se doblegará toda rodilla y [por Ti] jurará toda lengua. Delante de Ti, Señor, Dios nuestro, se inclinarán y se prosternarán. En honor a Tu Nombre darán pleitesía. Todos aceptarán el yugo de Tu reinado. Que prontamente reines sobre ellos para siempre, porque el reino Tuyo es y por toda la eternidad reinarás gloriosamente. Y está dicho: “Y será el Eterno Rey sobre toda la faz de la tierra, en aquel día el Señor será Uno y Su Nombre Uno”
Por lo tanto, si el pueblo de Israel se asimila, todo este gran objetivo de la creación se vería truncado.
la dejéis por heredad a vuestros hijos para siempre El segundo problema del matrimonio con los demás pueblos es que Dios prometió que expulsaría y destruiría a los demás pueblos de la tierra de Cnaan a causa de su maldad, y se la daría a los descendientes de Yaacob. Ahora bien, si el pueblo de Israel, se casa con los miembros de los demás pueblos, sucederá que sus descendientes, de una u otra forma, formarán también parte de la simiente de esos pueblos que Dios juró destruir y expulsar de la tierra de Cnaan. Por lo tanto, la simiente de Israel también sería aniquilada.
Estos son solo algunos de los problemas que plantea el matrimonio con miembros de otros pueblos, por no mencionar todos los inconvenientes espirituales que el mundo místico y esotérico explica al respecto y que no es así el lugar para citarlos.
Ezrá 9 Versículo 13
Aquí vuelve a retomar el tema del versículo 9, que Dios, merced a Su misericordia le abre una ventana de esperanza y luz, haciéndoles hallar gracia ante los reyes de Persia para que les permitan que se instalen en la tierra.
Ezrá 9 Versículo 14
Si bien Ezra se dirige a Dios, no hay duda que su mensaje es para el pueblo de Israel. Mediante estas preguntas retóricas, cuyas respuestas son obvias para todos, trata de que el pueblo de Israel se concientice y abandone su mal camino, de esa manera evitarían la consecuencia natural que con sus propios actos se están acarreando sobre sí mismos.
Ezrá 9 Versículo 15
El comentarista Metzudat David explica que en realidad Dios no nos ha pagado tal como mereceríamos, sino que ha obrado con misericordia con nosotros y no nos ha aniquilado completamente
porque nadie puede estar delante de ti a causa de esto Los comentaristas dicen que esta frase se refiere a que en realidad no tienen el mérito de poder estar ante Dios luego de haber pecado cuando Él obró con ellos con clemencia